Nueva York.
Un año después de que el asesinato de George Floyd por un policía blanco generó protestas y un ajuste de cuentas con las acciones racistas, la mayoría de los estadounidenses consideran que el racismo y la violencia policial son problemas graves en la nación, pero relativamente pocos creen que la atención prestada el año pasado a estos problemas ha redundado en cambios positivos.
Una encuesta de The Associated Press-NORC Center for Public Affairs Research revela que más estadounidenses que antes de la muerte de Floyd consideran que el abuso policial es un problema grave y la mitad cree que el sistema judicial es demasiado benigno con los agentes que causan daños durante su trabajo. Seis de cada 10 estadounidenses sostienen que el racismo en el país es un problema muy grave o extremadamente grave, un porcentaje similar al que dio la misma respuesta el año pasado.
Pero la mitad de los encuestados —y seis de cada 10 estadounidenses negros— dicen que la condena del agente Derek Chauvin por el asesinato de Floyd no ha alterado su nivel de confianza en el sistema de justicia penal. Chauvin, un exagente de la policía de Minneapolis, fue declarado culpable de homicidio en un juicio estatal por la muerte de Floyd. Un jurado federal de instrucción acusó a Chauvin y otros tres agentes implicados en el arresto de Floyd después de que se realizó la encuesta.
_
La encuesta AP-NORC de 1.842 adultos se realizó del 29 de abril al 3 de mayo con una muestra del panel probabilístico AmeriSpeak de NORC, diseñado para ser representativo de la población. El margen de error es de más/menos 3,2 puntos porcentuales.